El uso de las bolsas reutilizables de rafia ha aumentado notablemente en los últimos años. Se estima que alrededor de 250 millones de toneladas de bolsas se emplean en todo el mundo cada año para almacenar y transportar productos. En este post hablamos de estas bolsas reciclables, de sus propiedades y de los beneficios que aporta al Medio Ambiente.
Sobre el polipropileno
El polipropileno, que también se conoce como PP, es un tipo de material de resina termoplástica que se produce por la polimerización de propileno.
El polipropileno trenzado, el usado para las bolsas de rafia, son tiras de polipropileno que se han tejido en dos direcciones para crear un material altamente versátil y resistente que tiene muchas propiedades físicas beneficiosas, y lo más importante, también es reciclable.
El polipropileno es un material extremadamente versátil y puede usarse para una amplia gama de aplicaciones. Este material es resistente pero flexible, y se clasifica como semirrígido. Es muy resistente al calor y a los productos químicos. Además, es translúcido.
El polipropileno tiene una amplia gama de usos, que incluyen:
- Bolsas
- Embalaje de película transparente
- Fibras de la alfombra
- Electrodomésticos
- Cuerda
- Etiquetado
- Billetes
- Contenedores reutilizables
- Altavoces
- Equipo de laboratorio
- Ropa interior térmica
Reciclaje del polipropileno
Muchas veces surge la duda de si las bolsas de rafia son eco-friendly. La respuesta es clara y rotunda: sí, se pueden fundir, reciclar y convertir en otros productos. Además, duran lo suficiente y se pueden usar muchas veces, reduciendo así la demanda de productos de un solo uso.
Las bolsas reciclables de rafia pueden durar entre cuatro y cinco años si se usan adecuadamente.
Para determinar el nivel de reciclaje del polipropileno, se llevan a cabo estudios del ciclo de vida, que analizan el plástico desde la producción de materia prima hasta las etapas finales de la gestión de residuos, para evaluar la sostenibilidad del producto. El consenso general de estos estudios es que el PP tiene un potencial considerable como producto sostenible.
Hay cinco pasos en el reciclaje de PP:
Bolsas reciclables y reutilizables de rafia de Plasbel®
En Plasbel® fabricamos bolsas de rafia que cumplen dos de nuestros requisitos más importantes: son reciclables, reutilizables y de gran calidad.
El polipropileno trenzado es un material 100% reciclable y, además, la fabricación de este tipo de bolsas cuenta con un 70% de material reciclado.
Centramos todos nuestros esfuerzos en el proceso de producción y gestión, para asegurar un producto de calidad desde el primer momento. Así conseguimos fabricar bolsas reutilizables de rafia con las siguientes características:
Son reutilizables
No se degradan
Se pueden imprimir por uno o ambos lados
Permiten que el contenido respire
Tienen una mejor resistencia a la rotura que las bolsas de plástico
Bolsa de rafia isotérmica
Amplio tamaño que permite transportar productos grandes (como botellas): 42cm x 36cm x 20cm.
Cierre de velcro, fácil de sellar.
Asas resistentes que aportan mayor seguridad a la hora de transportar productos en su interior.
Son reutilizables.
Elaboradas con materiales reciclados.
La bolsa isotérmica de Plasbel® es un 30% más eficaz que la bolsa isotérmica normal
Para comprobar su efectividad, hicimos un test. Introdujimos dos botellas de agua congelada y un sensor de temperatura digital, y dejamos la bolsa al sol a una temperatura de 27,7ºC. Al cabo de seis horas, comprobamos que la temperatura del interior de la bolsa se mantenía en 9,1ºC, con una humedad de 54,8%.
De este modo, es posible transportar alimentos perecederos o congelados, conservando su temperatura (de 2º a 8º) durante horas. Son bolsas reutilizables y además, los materiales que la componen son completamente reciclables.
¿Cuál es el proceso de producción?
En Plasbel® aseguramos un producto de calidad desde el primer momento. Para cumplir esto, cada una de las bolsas reutilizables de rafia pasa por un proceso.
En primer lugar, escuchamos las necesidades de nuestros clientes y, a raíz de estas, elaboramos el diseño de la bolsa. Después, enviamos las muestras final al cliente desde el centro de producción de Plasbel en Asia.
El equipo de revisión revisa cada una de las bolsas terminadas, detectando cualquier defecto. Una vez revisadas, se trasladan al centro logístico de Plasbel®, desde donde se envía el producto terminado vía marítima a Plasbel. Recibimos los productos en nuestro centro logístico en España y hacemos un análisis completo del producto en el laboratorio.
Por último, una vez que hemos garantizado la máxima calidad de las bolsas, enviamos la mercancía al cliente.
El equipo de laboratorio de Plasbel® en España revisa las bolsas terminadas, detectando todos los defectos.
